jueves, 4 de diciembre de 2008

KORSIKA EXPRESS con Dretxu




Tras un intenso viaje por la isla de Córcega, he regresado a la villa encantada con todo lo compartido con mis amigos. Con la esperanza de que las maripositas que afloraron durante la marcha, siguieran permaneciendo en mi estómago y mi corazón al menos por una temporada. Pero la situación de envelasamiento en muy pocas semanas se desvaneció. Aún así continúo teniendo un grato recuerdo de los momentos vividos durante ese periodo con esa persona. Bueno, bueno dejémonos de sentimentalismos y empezemos con la crónica de una joven un tanto especial.
El comienzo de la inquietante aventura se produjo en Mena con la furgoneta repleta de mochilas y de individuos muy dispares (los Meneses), la primera parada fue en Balma para recoger a los villanos que llevaban toda la noche de desenfreno y rock and rol. Mientras tanto los de Güeñes esperaban ansiosos a su furgo la “Sodupeta”.
El primer contacto entre furgonetas se produjo durante las ocho horas del largo viaje hacia Marselle y mientras navegabamos por los mares en un ferry llamado la “Meridionale”. La llegada a Ajaccio fue dura pero inquietante. El ascenso a la torre Genovesa desde donde se contemplaban las islas Sangüinarias fue costoso… pero el llegar arriba y respirar aire puro fue un desahogo.


Posteriomente, nos dirigimos hacia Corte (ciudad universitaria). Allí conviven más de 4000 jóvenes a lo largo del año; nos recibió una profesora llamada Mathilde, hija de padres Andaluces afincados en Francia. Por cierto, una señora muy agradable y entregada.
Una vez en ese lugar, se nos asigno zona donde dormir. Algunos se desplazaron a una casa rural y otros nos quedamos en el instituto. Tras pasar tres días en el mejor lugar de montaña visto hasta el momento, partimos hacia Portobeccio.
Una vez en aquel pueblo, lo siguiente que ocurrió fue sorprendente ¡Llegamos a un rancho típico Corso! Con casitas de piedra y mucha fauna. Duchados /as y guapos /as, cenamos una suculenta cena (sopa típica Corsa, spaguettis y queso). A continuación Tumbing y charla nocturna. ¡A la cama que se nos ha hecho tarde! . Llegado el amanecer, ¡Todos arriba! Un día lluvioso y soleado. ¡Como no! Con Azku grabando a pie de pista sin perderse ni un ápice de lo acontecido. Ruta a caballo y baño en las mejores playas del litoral corso (Palombaquia).


Salida hacia el camping “Caballo Morto”. Tras instalarnos, las Hylaris prepararon una cena a la Encartada compuesta por: Ensalada de pasta, salchichas y Bizcocho de chocolate. Bueno una cena como tal no fue, más bien un banquete. Después de la comilona se celebró una ceremonia muy esperada, oficiada por el alcalde de Bizkaia. Tras unos arrumacos , los novios se dispersaron y no se supo nada más de ellos hasta la mañana del día anterior. Mientras el resto continuaba con la fiesta (para los jóvenes)y Güateque (para los abuelos). Tras un divertida velada, la luna de miel de los recien casados y enamoradísmos jóvenes continuó. Se encontraban felices y radiantes, tanto, que se animaron a posar juntos en una de las impresionantes vistas desde el mar de la ciudadela de Bonifaccio. Tras esta bonita travesía en barco, compramos los souvenirs para nuestros seres queridos y nos dispusimos a regresar hacia el ferry a Ajaccio.


Zarpamos y a las siete del día siguiente tocamos tierra. Una vez en Marsella regresamos a las Encartaciones con mucha pena. Las despedida fue emotiva, pero no triste ya que teníamos pensado reurnirnos en más ocasiones. Ya no somos un grupo de gente desconocida sino un grupo enorme de amigos y amigas que nos tenemos un gran aprecio.


Jóvenes, jóvenas y abuelitos (piratas y korrikalaris) sois todos muy diferentes pero a la vez muy iguales. Con esto quiero decir, que todos teneis una cosa en común estais un poco piradillos (me incluyo) y sois fantásticos.
Dretxu (para los amigos) je je. Un fuerte abrazo y un besazo enorme para todos /as.
Y si me permitis, Laura aunque no estás con nosotros, te recordaré siempre como la chica con una suerte tremenda haber conocido el amor puro y verdadero. Ésto va por ti. ¡Hasta siempre!